El Ministerio de Hidrocarburos y la Dirección de Minas de Chubut tienen en sus manos la resolución de un tema que levantó temperatura política en los últimos días y generó más confusión que certezas: la extracción de arenas silíceas de la meseta chubutense, aunque muchos hablen de las “arenas del Valle” porque su procesamiento y acopio se ha comenzado a hacer en la zona de Dolavon y 28 de Julio. Tanto Hidrocarburos como Minas deben definir si esta incipiente extracción de arenas silíceas será considerada como actividad minera de “primera categoría” o de “tercera categoría”. La diferencia no es menor: esta última no obliga a pagar regalías a sus extractores. Pero en el caso de que sea de “primera categoría”, las empresas explotadoras deben deducir una regalía al Estado provincial.

Además, ya hay legisladores que, además de las regalías, están pensando en impulsar una ley para extremar los controles para asegurar que una parte del procesamiento se haga en la provincia. La decisión que finalmente tomen las autoridades provinciales puede cambiar el perfil del negocio y, obviamente, la decisión de YPF de invertir en Chubut. Algunos, inclusive, sospechan que la petrolera estatal podría dejar caer su proyecto. Pero, por ahora, son sólo especulaciones.

Hace diez días, el diario BAE publicó un artículo sobre el tema, que incluyó unas declaraciones del ministro de Gobierno chubutense, Javier Touriñán: “Si no se puede negociar un valor de regalías que le convenga a la Provincia y que YPF pueda pagar, es probable que YPF termine decidiendo invertir en otra provincia”, alertó el funcionario del gobernador Martín Buzzi.

QUÉ SON

Las arenas ricas en cuarzo que son un insumo fundamental en la perforación de pozos “shale”, con el yacimiento de Vaca Muerta (Neuquén) a la cabeza, fueron descubiertas hace pocos años a unos 90 kilómetros de Dolavon, sobre un área cercana a la Ruta 11, en la meseta chubutense.

Desde entonces, los cateos y desarrollos de algunas empresas mineras de menor porte pasaron casi inadvertidos. Sin embargo, bastó que en abril del año pasado la petrolera nacionalizada YPF anunciara que estaba en vías de instalar una planta en la zona del Valle inferior para extraer arenas silíceas para utilizar en Vaca Muerta.

YPF, por intermedio de una empresa subsidiaria, Cimsa S.A., compró un campo con alto contenido de arenas silíceas y luego anunció que instalaría una planta de arenas. La polémica surgió cuando trascendió que YPF no haría en la provincia mucho más que el acopio de las arenas para luego trasladarlas vía terrestre –aunque en un futuro se prevé la construcción de un tren- hasta Vaca Muerta.

El hermetismo con el que YPF se ha movido con respecto a este proyecto en Chubut abonó las suspicacias. La empresa sólo salió a hablar del tema la semana pasada, para desmentir enfáticamente una presunta operación mediática y política en la que se aseguraba que YPF le había adjudicado un millonario contrato para transportar las arenas de Chubut a Neuquén a una empresa vinculada al polémico empresario santacruceño Lázaro Báez.

Sin embargo, por ahora, YPF no ha hecho más que adquirir un campo a la familia Conrad y algún que otro papeleo en dependencias provinciales. Fuentes no oficiales de la compañía aseguraron que las palabras del gobernador Buzzi, que la semana pasada pidió públicamente que la empresa “deberá convencer que el proyecto vale la pena”, no cayeron bien en la lujosa sede de la petrolera en Puerto Madero.

OTROS EMPRENDIMIENTOS

Pero YPF/Cimsa no es la única que tiene intereses en las arenas silíceas de la meseta chubutense. Otras dos empresas de menor porte ya están extrayendo y procesando este mineral: se trata de La Porfia, una empresa local que pertenece a Ricardo Romero, un empresario de Dolavon. Y Transportes Rada Tilly, una empresa comodorense propiedad de la familia Peralta, uno de cuyos socios es el conocido Carlos Aníbal, presidente de la CAI Comodoro.

Aunque a menor escala, estas dos empresas ya están explotando las arenas silíceas y han comenzado a vender a distintas empresas perforistas, que son las que brindan el servicio de perforación hidráulica de los pozos “shale”.
DEBATE

La Legislatura de Chubut debate desde hace algunas semanas el emprendimiento que la petrolera YPF proyecta en esa provincia para explotar seis canteras de arena silícea, una materia prima excluyente para perforaciones de hidrocarburos convencionales y shale, y que actualmente se importa. En la provincia todavía hay un debate extenso entre el oficialismo y la oposición para determinar qué ganancias le dejará a las arcas locales la extracción de esas arenas y la posibilidad de que esa actividad sea considerada como “minería de primer nivel” por lo que la compañía debería dejar regalías.

Las arenas silíceas son necesarias para sostener abiertas las micro fracturas en las rocas de donde se extrae los hidrocarburos no convencionales. El principal proveedor de esa materia es China, para lo cual se gastan actualmente unos 400 millones de dólares. Según los cálculos de YPF, la explotación de los yacimientos chubutenses en discusión hará que a fines de 2016 se alcance el autoabastecimiento. La firma proyecta una inversión de 150 millones de dólares y busca abaratar los costos de las perforaciones para shale. Un pozo vertical actualmente cuesta unos u$s 7 millones, mientras que un pozo horizontal puede valer el doble.

Si bien desde el parlamento local todavía esperan mayor información sobre el emprendimiento, que todavía discuten el gobierno de Martín Buzzi y la petrolera que preside Miguel Galuccio, hay varias cuestiones que ya se debaten. En principio, cómo se hará para transportar la enorme cantidad de arena que podrá sacarse de las canteras (se estima que Vaca Muerta requiere 40 millones de toneladas) sin que afecte a la infraestructura de transporte de la provincia. Por eso se prevé aprovechar el transporte marítimo con epicentro en Puerto Madryn. Las canteras se encuentran en el Valle inferior del Río Chubut.

PROYECTO DE LEY

Un grupo de diputados provinciales del Frente para la Victoria de Chubut (Fpv) presentaron la semana pasada un proyecto de ley para regular la extracción de arenas silíceas de seis canteras del Valle inferior, que será lavada y acondicionada en la cantera para transportarla a las provincias de Neuquén, Río Negro y otros destinos, incluyendo su utilización en la región.

El legislador Exequiel Villagra, su impulsor, sostuvo que “esta iniciativa constituye una oportunidad para la generación de empleo local y como tal no debe ser desaprovechado”. Entre otros puntos, se solicita al Poder Ejecutivo que asegure la inmediata colocación de balanzas fijas en lugares estratégicos vinculados a la extracción de arenas silíceas que permitan el control de las cargas admisibles permitidas por la Ley de Tránsito 24.449.

En el proyecto se contempla además que la concreción de esta iniciativa pone en marcha un número importante de actividades que promueven el desarrollo y fortalecimiento de la economía regional, y que por esta razón es necesario planificar el incremento de transporte de cargas para mitigar el impacto ambiental negativo que podría producirse en las rutas por la deformación de las calzadas. Por otro lado, se exige desarrollar un sistema de transporte marítimo regional e internacional que emplee los puertos patagónicos.