El titular del sindicato petrolero, Guillermo Pereyra, anunció que en los próximos meses se pondrán en funcionamiento 10 equipos de perforación con el objetivo de reactivar Vaca Muerta: serán cinco de YPF, tres de Total Austral y dos más de Pan American Energy.

La llegada de equipos no va a generar nuevos empleos, sino que los puestos se van a cubrir con las vacantes de los despidos de YPF y las demás empresas que adhirieron al Plan Nacional de Reconversión Productiva, que implicó un subsidio de 20 mil pesos y el retiro voluntario de unos 1500 petroleros.

“No los voy a cuantificar, porque son los errores que hemos cometidos varias veces. Pero nuevos trabajadores no va a haber, se van a sumar los despedidos que tienen prioridad�, expresó Pereyra en diálogo con LM Neuquén.

La inversión en los equipos supera los 2500 millones de dólares para el 2017, la mitad prevista para este año. Según el sindicalista, el desembolso en la región podría generarse en estos meses. “Lo claro que tenemos ahora es esto. Las inversiones pueden empezar la semana que viene�, enfatizó.

Siguen en desarrollo

Por otra parte, YPF continuará con la inversión en etapa de desarrollo masivo para Loma Campana, El Orejano y Loma La Lata, que son yacimientos que, de alguna manera, están sosteniendo la producción no convencional en la cuenca neuquina.

“YPF continúa con la etapa de desarrollo de tres yacimientos. Eso está en funcionamiento y se suma a la inversión de la Total de 500 millones de dólares en Aguada Pichana, con Pan American, representa la subida de equipos. El compromiso de Total es en forma inmediata tres equipos�, añadió.

El clima de inversión, a pesar de los anuncios del gobierno de Mauricio Macri, aún es reservado hasta que no se vean resultados concretos de la suba de equipos y la recuperación del empleo.

Desde que YPF anunció la baja de 33 equipos de ociosos se generó un quiebre de las expectativas, sumado al escenario internacional de un precio bajo del barril de crudo. Un grueso de los 1500 petroleros desactivados cobraron una indemnización y subsidio, a la espera de la suba de equipos de perforación y la vuelta a la vida laboral.