Con la política de poner a la minería como fuente importante de desarrollo económico para San Juan pero también como motorizadora de otras actividades productivas, el ministro de Minería, Alberto Hensel, hizo el balance del sector para este año, con resultado positivo.

“Se hicieron cosas interesantes con los pequeños productores mineros y la minería artesanal, nos falta mucho pero las bases están firmes, con financiamiento de proyectos, procesos de capacitación y a su vez tratando de resolver cuestiones que tiene que ver con la visión a mediano y largo plazo”, dijo el Ministro.

Para Hensel los objetivos de la pequeña minería fueron ampliamente cumplidos con el programa de Asistencia Financiera que permitió mantener un contacto permanente con la gente de los departamentos que realiza minería artesanal, no son sólo los de los departamentos donde están los grandes yacimientos, sino los no metalíferos que abarca a toda la provincia. Se financiaron más 120 proyectos en los que además se sigue trabajando porque este año se inició una segunda etapa donde se comenzó la capacitación en márquetin y comercialización.

Este año se afianzaron las líneas de crédito para modernización, que el año pasado y este fueron usadas plenamente, y los proyectos de innovación este año comenzaron a dar resultados.

En la minería de mediano y largo plazo, contó Hensel, hay decisiones importantes que han delineado con el Gobernador, como la creación del Mercado de Capitales local, el proyecto de ley ya salió del Ministerio. Este proyecto busca dar facilidades a las empresas para atraer inversiones en exploración. “Queremos profundizar acciones que permitan volver a tener el nivel de exploración que tuvo San Juan antes de Veladero, cuando había 60 proyectos en exploración. La idea es generar una ley que contempla una serie de herramientas que ayudarán mucho para sociabilizar la minería, con incentivos fiscales, es una buena forma de cerrar el año, pero aún debe ser revisado por la Secretaria Legal y Técnica de Gobernación”, dijo.

Agregó que San Juan representa el 80 % de la oferta cuprífera argentina y este año el Gobernador ha salido al mundo a ofertar estas posibilidades. Hay gran expectativa en Pachón, con todo un proceso por delante pero con grandes posibilidades como Altar, Los Azules y José María. “Venimos en un in crescendo en exploración, este año vamos a cerrar con 56 millones de dólares en exploración cuando en 2015 tuvimos 22 millones de dólares, y en 2016 pasamos a 51 millones. Vamos en ascendente importante, entre los cuales se cuenta la actividad en Lama, Azules, Filo del Sol, Gualcamayo. Es un buen dato, pero falta”.

Otro destacado del 2017 para Minería es lo que pasó con Veladero, “es importante porque se aplicó con rigurosidad la normativa y significa que si hay que suspender, se suspende y se procede a hacer las mejoras necesarias. Hay que obligar a la empresa que se invierta en seguridad y cuidado ambiental. La multa a la empresa estará definida en unos días más”, aseguró.

Pero lo mejor del año fue la definición del retiro de la escombrera de Pelambres. “Lo más destacado es dar inicio de solución al problema de la escombrera de Pelambres, digo inicio porque para poder concretar el retiro es sacar hasta la última piedra. Se hizo un gran trabajo judicial y hay que destacar al juez federal, Leopoldo Rago Gallo, al fiscal Francisco Maldonado,  al Fiscal de Estado, Jorge Alvo, y a todo el equipo técnico de este Ministerio que participó en cada reunión y en cada audiencia. Llegamos al punto que podemos decirle a sociedad sanjuanina que la escombrera se retira”.

En el balance, las exportaciones mineras pierden pero se gana, según el análisis de Hensel. “Este año van a bajar las exportaciones porque hay 40 días que Veladero no trabajó. Por año estaba produciendo 700.000 onzas de oro promedio, aunque llegó a producir más de un millón en algún año, que no es lo adecuado para la seguridad de la ingeniería que responde a determinada producción. Se van a compensar las exportaciones con otros años por el mejor valor de la onza de oro. Pero no podemos solo medir en términos económicos, tenemos que medirlo en seguridad, que haya producción minera pero que tengamos garantizados otros estándares para poder seguir consolidando la actividad con licencia social. Entonces, sí perdimos en exportación pero ganamos en seguridad. Ganamos en el equilibrio y la reingeniería del valle de lixiviación”.

Mientras que las exportaciones de los no metalíferos se mantienen constantes con mejoras en la exportación de cal y todo su movimiento. “Y seguirá mejorando, la mayor demanda de carbón residual de petróleo así lo indica. En las empresas se están haciendo inversiones importantes en hornos y tecnología.  Creo que este año llegamos a las 600.000 toneladas exportadas de cal”.