Con el fantasma del fin del barril criollo de fondo, el gobernador Omar Gutiérrez y los gremios locales se reunirán hoy con el ministro de Energía, Juan José Aranguren, y con representantes de las principales petroleras para acordar una hoja de ruta común.

El encuentro se da tras una semana de fuertes cruces y luego de una fallida reunión entre gremios y empresas. La intención de un sector del gobierno nacional de terminar con los incentivos al petróleo sumado a las presiones de las petroleras para flexibilizar las condiciones puertas adentro de los yacimientos, compusieron un cuadro de compleja resolución.

Según confirmó a “Río Negro�, Gutiérrez va a al encuentro con un plan para que se aumenten las inversiones en Neuquén el año que viene. El mandatario ya empezó a conversar sobre este tema con todos los actores de la industria de forma particular, pero insistirá con su desarrollo en esa mesa.

Entre el paquete de medidas que propone se encuentra la eliminación de las retenciones a la exportación de hidrocarburos, el sostenimiento del precio del gas, la ampliación del plan gas hasta 2020, un fuerte desembolso en logística e infraestructura y la fijación de un barril de crudo sin techo pero con un piso.

Este último punto es el que más peleas genera, ya que hay un sector importante del gobierno nacional que busca congelar los precios de los combustibles liberando el precio del petróleo, lo que implicaría una caída del 23% en su precio y un consencuente impacto en las regalías.

El otro punto que divide aguas es la creciente importación de combustibles, en detrimento de la producción local. Gutiérrez cuestionó el tema y también el dirigente petrolero Guillermo Pereyra, que pedirá la restitución de la comisión de hidrocaburos que creó el exministro de Economía Axel Kicillof, que tenía entre sus funciones el control del mercado de los derivados de petróleo. (…)