Así como las tecnologías de perforación empujan continuamente los límites de la profundidad de los pozos, el desafío ha sido  conseguir que el coiled tubing penetrase totalmente a lo largo de pozos horizontales para terminación y revisión. El problema con el despliegue del coiled tubing en un extenso pozo horizontal  es su flexibilidad. Imagínese tratar de meter una cuerda en una línea directa empujándola por uno de sus lados. Tarde o temprano  se doblará.

El coiled tubing afronta un desafío similar, ya que descansa sobre uno de sus lados en el pozo horizontal. Cuanto más  es desplegado, una cantidad creciente de fricción tiene que ser vencida. Tarde o temprano la tubería se dobla como un resorte, sin poder seguir avanzando. El empujar solamente hará que el resorte se comprima más.

Hay varias maneras de reducir la fricción dentro del pozo. Añadir lubricantes al lodo de perforación puede ser útil, aunque en muchos casos esto no resuelve el problema.

Una herramienta para el interior del pozo, llamada AG-itator, se instala cerca del final del coiled tubing. Tiene alrededor   de 6 pies de largo y está disponible en 2 1/8 pulgadas y 2 7/8 pulgadas de diámetro.  Del mismo modo en que agitando una cuerda se puede llegar a enderezarla, con la herramienta AG-itator, se instala una vibración en el coiled tubing, que logra superar los problemas de fricción y reduce el efecto resorte que se produce en el coiled.  

Trabaja de esta manera: el fluido de perforación se bombea dentro del coiled tubing y la heramienta AG-itator. Los pulsos son creados a partir del aumento y la disminución de la presión dentro de la herramienta. Mientras mayor sea la frecuencia del flujo mayor será la frecuencia de los pulsos. Al producirse a la frecuencia adecuada, la vibración reduce la fricción entre el coiled tubing y el pozo, permitiendo al coiled tubing ser empujado más profundamente dentro del pozo horizontal. El AG-itator  es utilizado también para mejorar la transferencia de peso al trépano para acelerar las operaciones de fresado.

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El alcance del coiled tubing  es también significativo para productores de gas y petróleo. Si el coiled tubing es usado para desarrollar herramientas para facturar o acidificar un pozo, entonces el alcance máximo del coiled tubing determina efectivamente cuán larga puede ser la sección horizontal. Un equipo de perforación que utiliza tubería convencional-la cual es mas rígida que el coiled tubing- podría ser capaz de perforar mas cantidad de metros, pero esta profundidad no tendría sentido si el coiled tuibing no puede llegar hasta allí luego para la fase de terminación.  Si sienten que no pueden empujar el coiled más allá de los 1500m, entonces no van a perforar más allá de eso, ya que no podrán luego estimular el pozo mas allá de ese punto.

Encana corp., que empezó a utilizar la herramienta hace dos años atrás, en este momento las usa en la terminación de unos 80 pozos por año en Canadá. En promedio, estos pozos tienen alrededor de 2500m de profundidad vertical y 2500m de largo en la sección horizontal.
Estiman que el coiled tubing solamente  alcanza el final del pozo horizontal un 5% de las veces, y el 95% restante, el AG-itator es necesario para lograrlo.

La compañía BJ Services ha estado utilizando la herramienta en el oeste de Canadá al menos durante los últimos 5 años, afirma Darcy Schultz, el especialista en coiled tubing de BJ. El pozo más profundo en el que Schultz usó el AG-itator fue de 6400m (el punto de desviación del pozo se encontraba a los 3000m y la desviación era de 90º). “Mis modelos decían que encontraríamos la zona de bloqueo a los 5.500m, pero llegamos hasta el final”, comenta. Era una terminación de un pozo sin entubar en Alberta, Canadá.

Schultz describe el AG-itator como un arma más del arsenal con el que cuenta el área de ingeniería de terminación. Puede utilizarse en terminación de pozos entubados y sin entubar, ya sean de gas o petróleo.

Fuente: New Technology Magazine

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