Es por la demanda que surgió luego de la expropiación de la petrolera de bandera, en 2012, y por la que Argentina fue condenada el año pasado por la justicia de EEUU. La demanda está en apelación, pero comenzaron los coletazos de ese fallo

Sede central de la compañía estatal YPF en Puerto Madero.  Comenzaron los pedidos de embargos a bienes del Estado argentino y ejecuciones de la sentencia condenatoria en un tribunal de EEUU por la causa de la expropiación de YPF. 

La primera demanda fue presentada en las últimas horas en Londres, Inglaterra. El año pasado el estudio inglés Burford Capital –que compró los derechos de litigio de dos ex accionistas de la empresa que aseguraron haber sido perjudicadas por la decisión política de Cristina Kirchner– resultó el principal beneficiario del fallo de la jueza Loretta Preska, quién lleva adelante este caso desde su estrado del Distrito sur de Manhattan por ser YPF una empresa que cotiza en Wall Street. Preska sentenció al Estado por una suerte de mala praxis expropiatoria y lo condenó a pagar un resarcimiento de USD 16.000 millones. 

Argentina apeló la medida, pero no presentó avales por ese monto. No los tiene. En ese contexto, se abrió un instancia de posibles pedidos de embargos contra activos del país. El martes se supo que la jueza había citado a la partes a una reunión telefónica, el próximo 18 de marzo. Allí espera despejar algunas dudas sobre qué va a pasar con los embargos. En los últimos días hubo presentaciones cruzadas en este sentido. 

Pero una de las partes se adelantó y realizó una presentación en una corte inglesa. Si bien no hay mayores detalles aún sobre la causa presentada ante la Corte Comercial de Londres, bajo el número CL-2024-000129, Infobae pudo saber que se trata de un pedido de reconocimiento del fallo de Preska en el caso YPF. (...)