En la provincia ampliaron el Parque Eólico Arauco a 99,4 MW. En Formosa se inició la instalación de 25.800 paneles fotovoltaicos. Los proyectos de energía limpia impactan, también, con la creación de empleo.

e n el camino hacia una matriz energética más diversificada en Argentina, varias provincias están avanzando con propuestas centradas en energías renovables, destacándose especialmente los proyectos eólicos y solares.

El Parque Arauco, en la provincia de La Rioja, sigue avanzando en su ambicioso desarrollo energético con el inicio del montaje de 18 nuevos aerogeneradores correspondientes a la etapa 2 del proyecto PEA 3, que fue financiado con los fondos provenientes de la venta del Parque Arauco II a la empresa Pampa Energía durante 2022.

Esta ampliación permitirá que el parque sume un total de 28 aerogeneradores en esta fase, alcanzando una capacidad instalada de 99,4 MW. En conjunto con los proyectos anteriores, el Parque Arauco llegará a operar con 101 aerogeneradores en total.

Desde la dirección de obras de la empresa Parque Arauco explicaron que las tareas de montaje continuarán hasta la segunda semana de marzo.

"Estaríamos completando los 18 aerogeneradores montados para esa fecha. Posteriormente, seguiremos con la puesta en marcha, con la expectativa de finalizar esta etapa para el transcurso julio, siempre dependiendo de las condiciones meteorológicas", detallaron.

"Es una obra de alta precisión y grandes desafíos logísticos, pero tenemos un equipo preparado y comprometido para llevar adelante esta etapa crucial del proyecto", concluyeron desde el equipo técnico.

La energía eólica en el país viene pisando fuerte, con 60 parques distribuidos principalmente en las provincias de Chubut, Río Negro, Santa Cruz, Buenos Aires y La Pampa.

Se trata de un sector de generación eléctrica relativamente nuevo en la Argentina y con pronunciado desarrollo en los últimos años.

La Patagonia es la mejor región para el desarrollo de la energía eólica, ya que sus vientos están entre más fuertes y constantes del mundo. Esto permite que los parques eólicos de la zona funcionen al máximo entre el 50% y el 60% del tiempo, lo que los convierte en los más eficientes.