Los días pasaron, y nadie tomó medidas para detener el derrame de miles de litros de crudo que continúan poniendo en peligro el ecosistema marino de la zona.

El petróleo fue arrastrado durante todo este tiempo sin ningún control, llegando a las playas Istmo y Costa, y poniendo en peligro el criadero dehuevosde tortugas golfinas, las cuales se encuentran en peligro de extinción. Esta situación, ha hecho que Greenpeace intervenga, denunciando los hechos, de los cuales Petróleos  Mexicanos debería haberse hecho cargo.

Tampoco han actuado la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente ni la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat). Algunas versiones afirman que se estarían derramando unos 600.000 litros diarios de petróleo, mientras que los responsables aseguran que solo fueron unos pocos miles de litros, porque la boya no estaba en uso, pero lo cierto es que no hay nada claro en torno a este accidente, y las masas de crudo están comenzando a verse por diversos sitios.

Fuente: Ecologistas en Acción

1776 lecturas | Ver más notas de la sección Medio Ambiente