Según el informe de resultados, las ganancias de la compañía controlada por el Estado brasileño también bajaron, un 7,5%, respecto al segundo trimestre. El resultado del tercer trimestre "es justificado por la caída del Brent y también por la reducción de los márgenes de los derivados en el mercado internacional", dijo la empresa en una nota. 

La reducción en las ganancias está en línea con la media de las proyecciones de cuatro instituciones financieras consultadas por el diario económico Valor. Esta es la segunda publicación de resultados financieros desde el cambio en la política de precios de la empresa, antes alineados con el mercado internacional. La actual, según el gobierno, permite evitar alzas pronunciadas a los consumidores ante incrementos en la cotización internacional del crudo. 

El presidente Luiz Inácio Lula da Silva, que ascendió al poder en enero de este año, ha criticado fuertemente el lucro de la compañía que, dice, favorece a los accionistas en detrimento de la sociedad brasileña. Jean-Paul Prates, un exsenador del gobernante Partido de los Trabajadores y presidente de la petrolera designado por Lula, ha asegurado que la compañía continuaría teniendo precios "competitivos". 

El último ajuste de precios a las distribuidoras fue implementado el 21 de octubre, cuando bajó el costo de la gasolina (-4,1%) y subió el del diésel (+6,6%). En el anuncio, Petrobras destacó sin embargo una reducción en la variación acumulada en el año. 

El mercado reaccionó el 23 de octubre a una propuesta de cambios en el estatuto por parte del consejo directivo, inquietos ante lo que interpretaron como un margen para posibles intervenciones del gobierno izquierdista. La iniciativa para crear una reserva de remuneración del capital, que inversores temen afecte la distribución de dividendos, y flexibilizar los nombramientos de ejecutivos generó aquella jornada una caída en las acciones del 6%. La discusión se realizará el 30 de noviembre próximo en una Asamblea General Extraordinaria. La política de dividendos ya había sido revisada en julio, limitando los dividendos a los accionistas.