Si bien las multas estaban previstas para más de 700.000 usuarios, Edenor y Edesur aclararon que se aplicarán a una cantidad notoriamente menor a ese universo. Eso se debe a que los recargos previstos solo serán aplicados en esta instancia a los edificios que ya cuenten con medidores en condiciones de calcular la energía reactiva , lo que reduce los edificios residenciales pasibles de la sanción a “ un número ínfimo â€�, confiaron a BAE Negocios en el organismo de control. 

La aclaración: quiénes serán multados La resolución 544/24 del ENRE estableció en su artículo cuarto que las multas solo se aplicarán “a partir de la instalación por parte de las empresas Edenor S.A. y Edesur S.A. de medidores que registren coseno (fi) en la acometida general comúnâ€�. Esa aclaración de la resolucion 522/24 reduce sustancialmente la cantidad de edificios con posibilidad de ser multados, ya que solo serán aquellos “donde se encuentre un medidor que pueda generar energía reactivaâ€�. Qué es el factor de potencia 

La medida llevó a muchos consorcistas a tomar un virtual curso acelerado para familiarizarse con términos poco conocidos fuera de los ámbitos especializados. Al respecto, debe recordarse que la resolución 85 de febrero de este año dispuso que el mínimo de factor de potencia exigido para los edificios y complejos residenciales del �rea Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) debía elevarse de 0,85 a 0,95. El factor de potencia es la relación entre la energía activa (la generada por la iluminación, algunos electrodomésticos y aparatos periféricos) que se expresa en kwh y es cobrada periódicamente por las distribuidoras, y la reactiva, el magnetismo generado por los motores en casos como lavarropas, heladeras, ascensores, bombas de agua, entre otros. Ese factor de potencia se mide de 0 a 1, en una escala en la que 1 indica la situación ideal en materia de seguridad y sustentabilidad del sistema eléctrico, es decir que cuanto más cerca se esté de ese nivel, habrá menos riesgos de colapso, sobrecalentamiento de cables o cortes del suministro.

La situación en el AMBA El paso del coseno (fi) 0,85 a 0,95 implica que el AMBA se alinee con las exigencias vigentes no solo en los principales países, sino también en muchos centros urbanos del resto de la Argentina. Los usuarios de Edenor y Edesur que cuentan con un factor entre 0,85 y 0,95 son 702.478, en tanto otros 267.261 ni siquiera llegan a cumplir con el mínimo de 0,85, lo que conforma un total de 969.739 que a partir del 2 de octubre estarían en falta. Sin embargo, de ese casi millón de usuarios solo serán objeto de multas que las distribuidoras “podránâ€� cobrar (así está escrito en la resolución 544) aquellos que cuenten con los medidores en condiciones de calcular la energía reactiva. Si bien en el ENRE no cuentan con el número exacto de esos edificios, aseguraron a BAE Negocios que se trata de una cantidad “ínfimaâ€� , a lo que se debe añadir que la resolución no obliga a las distribuidoras a aplicar los recargos sino que les otorga la facultad de manera opcional. 

Cuándo se activan las multas de Edenor y Edesur A partir del 2 de octubre, Edenor y Edesur “podrán� comenzar con el cobro de recargos , que, además, serán de aplicación gradual: Desde el inicio y hasta el 30 de abril de 2025 el 30% Desde el 1° de mayo se elevará al 60% Finalmente, a partir del 1° de diciembre del año próximo se cobrará el recargo completo. Por cada kwh consumido s e pagará 1,5% más por cada centésimo de diferencia con el factor de potencia de 0,95. Si hasta ahora se exigía 0,85, los 10 centésimos de diferencia implicarían un recargo del 15% por kwh, con un máximo para cobrar del 40%.