La forma de fijar el nuevo Impuesto sobre los Combustibles no tuvo el efecto positivo que el gobierno supuso sobre los precios finales de la nafta y el gasoil, evalu贸 el especialista en temas impositivos Marcelo Saleme Murad, en alusi贸n al incremento autom谩tico del gravamen seg煤n la evoluci贸n trimestral del 脥ndice de Precios al Consumidor, que debe aplicarse de acuerdo a la 煤ltima reforma tributaria incorporada  a la Ley 23.966.El tributarista explic贸 a EconoJournal que lo que intent贸 en origen la Ley 27.430, de reforma fiscal, fue desacoplar el impacto del ITC (una al铆cuota), del aumento del precio del petr贸leo y la evoluci贸n del d贸lar, estableciendo que el nuevo impuesto  ser铆a una suma fija actualizable por inflaci贸n. 

Al respecto consider贸 que aplicar este criterio considerando lo que est谩 ocurriendo con el IPC, no termina teniendo un efecto distinto del que ten铆a la al铆cuota ya que solamente, en el mejor de los casos, demora la aplicaci贸n del aumento del impuesto. Y advirti贸 que si la inflaci贸n sube m谩s, se dar铆a el efecto contrario, es decir, aumentar铆a m谩s el impacto impositivo en el precio final de los combustibles. Hoy el petr贸leo est谩 bajando (en rigor oscilando dentro de un cierto rango) pero el impuesto no baja, pr谩cticamente se duplic贸 en nueve meses, a帽adi贸.Saleme se refiri贸 a trascendidos seg煤n los cuales hubiera sido peor el aumento impositivo con el sistema anterior del ITC, y se帽al贸 que ello no es cierto, pues en 茅ste caso aumenta el impuesto y no los dem谩s componentes del precio del combustible. 

El nuevo sistema puede ofrecer un delay en el aumento del impuesto, que sigue infaliblemente a la inflaci贸n. Saleme Murad sostuvo que la 煤nica soluci贸n real pasa por bajar la cantidad de impuestos sobre los hidrocarburos, en lugar de recurrir a mecanismos que demuestran ser absolutamente inocuos o incluso perjudiciales.El combustible, explic贸, ya trae cargas impositivas que se trasladan, en alusi贸n al IVA (21 por ciento), a la tasa de Ingresos Brutos, y si bien un impuesto grava en boca de pozo, otro en destiler铆a y otros en surtidor, van configurando una presi贸n fiscal muy grande, de manera que no s贸lo hay que bajar las al铆cuotas sino tambi茅n simplificar la estructura impositiva que hoy grava a estos productos.Las empresas (productoras, refinadoras y comercializadoras) no absorben los impuestos directos, por lo que se produce un efecto cascada en el precio final al consumidor, algo similar a lo que ocurre con otros precios de la econom铆a.

El precio final de un producto contempla costos directos e indirectos y los que m谩s pueden afectarlo son los directos, como son los impositivos,  m谩s a煤n  si se los actualiza por inflaci贸n, puntualiz贸 Saleme.Otro aspecto que Saleme Murad destac贸 es que si bien el referido Impuesto a los Combustibles dej贸 de ser una suma ad valorem para convertirse en una suma fija sujeta a actualizaci贸n por inflaci贸n, se modific贸 a la baja el porcentaje que el agro puede descargar o computar como pago a cuenta del Impuesto a las Ganancias ya que se redujo del 100 por ciento, al 45 por ciento.