América Latina, la más cercana al principal y -por ahora- único centro de producción de este tipo de petróleo y gas, Estados Unidos, se ha sentado a evaluar su participación en un sector que dejó ya muy atrás la teorÃa de que el petróleo tenÃa los dÃas contados. Los descubrimientos de energÃa convencional y no convencional son concretos. Brasil, México, Venezuela y Argentina son muestra de ello, mientras que Ecuador, Colombia y Perú tienen claros planes para explorar en busca de reservas. Centroamérica, incluso, quiere elevar esfuerzos en conjunto para integrarse de manera unificada y al menos reducir la elevada dependencia de energÃa importada. República Dominicana, también apuesta por la búsqueda acelerada de petróleo, "o lo que sea", para lo cual preparan un esquema para atraer inversiones, según revelaron fuentes del sector.
Hasta Chile, absolutamente dependiente de gas y crudo foráneo, se lanzó al agua en la zona de Magallanes en la Patagonia para evaluar la existencia de combustibles en lutitas. Las energÃas renovables tienen también un sitial de honor, en especial en las naciones dependientes de energÃa importada. Descubrir reservas y cuantificarlas, es solo el comienzo, pero lograr la monetización de esos recursos es casi el final de la historia.
El analista, Roger Tissot, economista de energÃa e invitado permanente del Instituto de las Américas dice que "el gran reto de los paÃses es saber cómo hacer las cosas para que el resultado final repercuta en beneficios para su población y desarrollo". El problema ya no es que no existe petróleo, sino muy por el contrario, los reservorios son casi que infinitos, y aún hay muchos por descubrir. Sin embargo, considera que el momento es ahora.
Los principales temas de discusión versan en el nacionalismo y la captura de la renta petrolera como único fin. Esta tendencia de paÃses que dependen exclusivamente del petróleo como ingreso de divisas, según el analista Ramón Espinasa, ex jefe de economÃa de Pdvsa , no es necesariamente excluyente en cuanto al control de los recursos por parte del Estado. Considera que asà debe ser, pero que debe existir una visión que no cercene el desarrollo de la industria petrolera.
COLOMBIA PRIORIZA EXPLORACIÓN PÀRA ELEVAR LA PRODUCCIÓN
Los neogranadinos decidieron no perder en tiempo. Pese a estar entre los últimos paÃses con reservas de crudo de la región, intentan revertir esa realidad de que solo les queda petróleo para los próximos seis años. Colombia dio un giro drástico a su realidad energética. No solo persigue el autoabastecimiento, sino que además estudia los patrones de crecimiento de América Latina y sus proyecciones de demanda, para desarrollar mercados.
Desde el año 2007 los colombianos revirtieron el descenso de su producción que iba en caÃda libre desde finales de la década de los noventa, pero la apertura de su legislación, con el ingreso de petroleras privadas hoy le ha generado dividendos. La producción se elevó desde 500 mil barriles por dÃa a 944 mil barriles. Las metas son ambiciosas, aseguró el viceministro de EnergÃa y Minas de Colombia, Orlando Cabrales, quien sostiene que la meta para este año es llegar a 1.150 millones de barriles por dÃa, y hacia 2014 superar 1.200 millones de barriles.
El crecimiento interno bruto petrolero de los neogranadinos, dice Cabrales, es muestra del esfuerzo que hace el paÃs en exploración y producción. Solo en petróleo y gas han crecido entre 2011 y 2012 desde 3,4% a 5,45%. Mientras que el aumento de pozos para explorar creció desde 20 pozos entre 2001-2002 hasta 131 pozos en 2012, considerado un número record, y para este año se elevará a 135 pozos.
Colombia hace hincapié en explorar; sus reservas pobres de petróleo de escasos 2.377 millones de barriles insitu son su gran bemol. Para los próximos tres a cuatro años estiman incorporar a ese volumen 38.794 millones de barriles, de los cuales 10% podrÃa ser crudo no convencional. Cabrales asegura que se espera el concurso de grandes petroleras, y que la directriz es aumentar reservas y mejorar la tasa de recuperación del crudo en los yacimientos.
BRASIL CON TRASPIÉS, PERO ANDANDO
Desde que en 2007 Brasil anunciara al mundo energético que se ponÃa a valer dentro de ese concierto, tras el descubrimiento de grandes yacimientos en aguas profundas, que por sus enormes capas de sal la zona petrolera ha sido popularizada como presal, esa industria ha tenido un crecimiento vertiginoso. Aunque en lo que va de año sus indicadores han descendido, sigue siendo un destino preferido por grandes transnacionales petroleras que, incluso, ya hacen vida en el paÃs, pero que no han mirado con buenos ojos la insistencia de que se pongan condiciones estrictas sobre el uso de componente local.
Cuenta el analista independiente, Pedro MartÃnez Lara, que Brasil registró este año su primera pérdida en los últimos 15 años. El valor de mercado de Petrobras alcanzó la cifra de $243.000 millones en diciembre de 2007, mientras que la cifra actual se coloca en $125.000 millones. Brasil trabaja en ello vendiendo activos en el exterior que los ha hecho distraer recursos para sus planes internos.
Pese a esta situación, que analistas observan de coyuntural, es incuestionable que los cariocas lograron elevar su producción hasta 2,598 millones de barriles equivalente, entre gas y crudo. Brasil ha sido considerado el fenómeno petrolero de los últimos años; sus reglas claras en el negocio, sin soltar el control, han sido claves para su desarrollo y sus planes futuros que podrÃan aumentar sus actuales niveles de reservas que giran en torno a 16.000 millones de barriles equivalente. Muy por debajo aún de su socia Venezuela que ostenta 297.000 millones.
ARGENTINA EN EL DILEMA DE SER O NO SER
La gran pregunta de la conferencia en California fue si ¿cuantificará y explotará Argentina sus posibles reservas de gas y crudo no convencionales en Vaca Muerta? luego de que sacara del juego a su socia española Repsol y le expropiara 51% de las acciones. De este yacimiento petrolÃfero situado en Neuquén, cuyo descubrimiento se anunció en diciembre de 2010 por Repsol YPF, se dice que podrÃa contener crudo para 500 años, y que la estatal petrolera gaucha, YPF, proyecta que podrÃa recuperar 22.807 millones de barriles de petróleo equivalentes, entre crudo y gas.
Sin embargo, el ambiente de negocios en el paÃs sureño no es el más propicio para captar inversiones. Vaca Muerta, la supuesta gallina de los huevos de oro, genera apetito entre las grandes, pero dice el economista del sector energético, Roger Tissot, que "las reglas en arenas movedizas son la peor señal para los capitales". Más aún luego de la cuestionada nacionalización de las acciones que reposaban en manos de Repsol, casi posterior al hallazgo.
"En Argentina se ha desestimulado a las empresas, debido a los controles de precios de los combustibles", añade el analista petrolero Ramón Espinasa, quien considera que la presión que se ha generado en la industria ha hecho descender la producción de crudo en los últimos 10 años, y el interés. Para Espinasa el desarrollo del gas y crudo de lutitas en Vaca Muerta va a depender de decisiones gubernamentales, y de la inyección de enormes cantidades de capital y del uso de tecnologÃas de punta, que duda tenga el gobierno argentino.
John Padilla, socio y director general de IPD Latin America, y ponente en La Jolla, señala que Argentina serÃa un gran reto para cualquier empresa del sector. Mientras que Jaime Buitrago, de Exxon Mobile, asegura que el yacimiento de Vaca Muerta es uno de los focos de atracción de las empresas del sector, tanto en México como en Colombia.Vaca Muerta parece ser la tabla de salvación más concreta de Argentina para superar sus carencias energéticas.
MÉXICO EN EL UMBRAL DE LA APERTURA
El control de la industria petrolera por parte del gobierno de México data de 1938. Desde ese momento ninguna otra empresa petrolera ha participado en ese negocio en la nación azteca. La estatal Petróleos Mexicanos (Pemex) que ha debido sortear un camino en solitario, desde entonces, podrÃa abrir sus puertas luego de un largo proceso de análisis en torno a su legislación. El cambio implicarÃa la participación del sector privado en los negocios del área tanto externa como interna.
Esta decisión está a punto de cocción y mantiene a las grandes transnacionales con la lupa puesta sobre los acontecimientos. El debate no ha sido fácil; la idea de los aztecas de perder poder sobre la mayor industria de esa nación y el factor nacionalista, han puesto a los mexicanos encargados de tomar las decisiones en una encrucijada, que debe ser resuelta con mano zurda, racionalidad y con las mejores condiciones para ese paÃs.
Los pobres resultados que viene arrojando Pemex en los últimos años, no solo en producción declinante, sino que además en bajas inversiones, han sido elementos detonantes para que México se plantee una apertura que impulse la entrada de capitales para recuperar sus números. La eventual apertura no solo tendrá dimensiones sobre la energÃa convencional, sino sobre la no convencional; esta última protagonista de los cambios que se dan en materia gasÃfera y petrolera en los Estados Unidos.